sábado, 21 de abril de 2012

Estoy viva


     


Vivo cada día, sintiéndo que en mis venas corre gratitud por este vivir que me envuelve.


Vivo y respiro,¡qué asombro!


Miran mis ojos lo bello y lo horrendo y mis manos a uno acarician y a otro, Dios quiera, ponen remedio.


Vivo y me comprometo con el vivir que nunca se cansa, y si lo hace, lo acepta, y confía, con el vivir que todo acoge, que se come el rencor para despacharlo, que cree en la humildad y lo sencillo, en los abrazos de la vida y los desengaños; a veces se enardece y otras se doblega.


Vivo y me lleno de ganas y río. Es dicha vivir y conocerte y tenerte conmigo. Y te hablo a ti, y a ti, y aquel.


Si algún día, ¡Dios mío escúchame!, me concedes el don de llenar mi rostro de surcos y arrugas…entonces,


seguiré levantándome pronta, como quien baila feliz con el amor imaginado. Agarrando mi Vida con las manos, pareja de baile que aún me resiste y a la que me entrego. Y en la mañana respirar, oler, cerrar los ojos, dejar que lleguen a mí viento, sol, lluvia, amor venido de mil costados, comer pan y tomate, beber las lágrimas de los niños (no me lloren más). Acunar, cuidar, besar, pedir perdón.


Me comprometo, hoy y entonces, a llenar mis días, dándome y recibiéndome, ¡qué oportunidad!. Feliz de decir, 


estoy viva.



SCG